John Henry Kurtz (JHK). Con la tecnología de Blogger.
Mostrando entradas con la etiqueta Los testigos de Jehová y la dignidad de quienes desean abandonar la confesión religiosa. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Los testigos de Jehová y la dignidad de quienes desean abandonar la confesión religiosa. Mostrar todas las entradas

miércoles, 19 de septiembre de 2012

La lapidación de un familiar está justificada, ¡por lo menos teocráticamente!

Sarita Bann (confidente apóstata)

El B.O.E.: The Watchtower, 15 de octubre de 1964, página 639

Estimados camaradas víctimas de la lapidación social y familiar ordenada por el Cuerpo Gobernante:

Nuestra fiel hermana apóstata, Sarita Bann, nos deleita un día más con la aportación de este documento teocrático de nuestra confesión religiosa del notorio arraigo y olé.  Corresponde al buque insignia de las publicaciones de la entidad religiosa; The Watchtower (en español La Atalaya), 15 de octubre de 1964, página 639.  Notaremos cómo se nos exige  --por enésima vez--  a los miembros de nuestra confesión, a que participemos activamente en lapidar a nuestros seres queridos que deseen voluntariamente abandonar este grupo religioso.

Antes de continuar, tenemos que hacer una pausa y recordar a nuestros amables lectores que, lo nuestro no es la demagogia watchtoweriana de Testigo Humano y otros agentes Watch a sueldo; nos centramos en documentar los hechos, los exponemos, y los lectores pueden participar libremente dando sus opiniones al respecto.  Denunciamos unos hechos que, a nuestro entender, suponen una violación de los derechos humanos de las personas, por parte de esta entidad religiosa.  ¡Así funcionamos!

Además, se añade a esto que, los mandamases, pretenden borrar y modificar la historia insigne de nuestra confesión, haciendo inviable el que las personas puedan hurgar en lo que han publicado antes del año 2000. En la página web de la confesión religiosa de los testigos de Jehová, sólo puedes acceder  al contenido de un número limitado de sus publicaciones más recientes, ¡imposibilitando investigar en su historia de despropósitos!  Y, esa, es una de las razones fundamentales de nuestra razón de ser: informar a la casa de la fe.

Precisado esto, sólo nos queda decir, ¡va por ustedes!

El artículo se inicia con una pregunta:
¿Por qué en la Ley Mosaica, se exigía que la mano del testigo debería ser la primera en apedrear al condenado a muerte y, tiene alguna aplicación o se deriva alguna lección para nosotros en la actualidad? O sea, ¿qué lección útil podemos aprender de la lapidación que se practicaba en el antiguo Israel, nosotros, los ciudadanos de los países democráticos y que respetamos  y fomentamos el respeto a los derechos humanos?  ¡Parece que la entidad religiosa sí que obtiene lecciones valiosas!
El celo por la "adoración pura", no sólo se esperaba de los jueces o ancianos de la ciudad, sino del simple ciudadano...,  ¡"para mantener a la organización limpia"!  ¿Cómo podía el ciudadano mostrar su celo?:
Ese tipo de celo se ilustra por los levitas cuando ellos actuaron contra sus hermanos israelitas que estaban practicando la adoración de un becerro en Sinaí y,  cuando Finehás  --el levita-- ejecuta el simeonita Zimri, la vez que 24.000 israelitas fueron ejecutados por inmoralidad con Baal de Peor. Éxodo 32:25-29:25:
Y llegó a ver Moisés que el pueblo andaba desenfrenado, porque Aarón los había dejado desenfrenarse para ignominia entre sus opositores. 26 Entonces Moisés tomó su puesto en la puerta del campamento y dijo: “¿Quién está de parte de Jehová? ¡A mí!”. Y todos los hijos de Leví empezaron a reunirse en torno a él. 27 Ahora les dijo: “Esto es lo que ha dicho Jehová el Dios de Israel: ‘Ponga cada uno de ustedes su espada sobre el costado. Pasen y vuelvan de una puerta a otra puerta en el campamento y mate cada uno a su hermano y cada uno a su prójimo y cada uno a su conocido íntimo’”. 28 Y los hijos de Leví procedieron a hacer como había dicho Moisés, de modo que en aquel día cayeron del pueblo unos tres mil hombres. 29 Y Moisés pasó a decir: “Llenen hoy su mano de poder para Jehová, porque cada uno de ustedes está contra su propio hijo y contra su propio hermano, y para que él les otorgue una bendición hoy”.
Números 25:6-9, donde dice: 
"6 Pero, ¡mire!, un hombre de los hijos de Israel vino, y estaba haciendo que se acercara a sus hermanos una madianita, ante los ojos de Moisés y ante los ojos de toda la asamblea de los hijos de Israel, mientras ellos se hallaban llorando a la entrada de la tienda de reunión. 7 Cuando Finehás hijo de Eleazar hijo de Aarón el sacerdote alcanzó a ver esto, en seguida se levantó de en medio de la asamblea y tomó una lanza en la mano. 8 Entonces fue tras el hombre de Israel dentro de la tienda abovedada y traspasó a ambos, al hombre de Israel y a la mujer, por sus partes genitales. Con eso se detuvo el azote de sobre los hijos de Israel. 9 Y los que murieron del azote ascendieron a veinticuatro mil".  
A los padres se les exigía que llevaran ante el juez al hijo rebelde e incorregible, sin protegerles de ser condenados a muerte.  Incluso, se exigía la colaboración activa de las padres o familiares, delatando al hijo ante la justicia teocrática, ¡sabiendo que les esperaba la muerte como sentencia!
Si uno se convierte en un falso profeta o en un apóstata, el amor y la lealtad a Jehová Dios y su organización prevalecen ante los vínculos sanguíneos más próximos, tales como los de un hijo y una hija. Deuteronomio 21: 18-21; y 13: 6-11, donde dice: 
18 ”En caso de que un hombre llegue a tener un hijo terco y rebelde, que no escucha la voz de su padre ni la voz de su madre, y ellos lo han corregido, pero él no quiere escucharles, 19 entonces su padre y su madre tienen que asirlo y sacarlo a los ancianos de su ciudad y a la puerta de su lugar, 20 y tienen que decir a los ancianos de su ciudad: ‘Este hijo nuestro es terco y rebelde; no escucha nuestra voz, es glotón y borracho’. 21 Entonces todos los hombres de su ciudad tienen que lapidarlo, y él tiene que morir. Así tienes que eliminar de en medio de ti lo que es malo, y todo Israel oirá y verdaderamente llegará a tener miedo". 
6 ”En caso de que tu hermano, el hijo de tu madre, o tu hijo o tu hija o tu esposa estimada o tu compañero que es como tu propia alma, tratara de atraerte en secreto, diciendo: ‘Vamos y sirvamos a otros dioses’, que tú no has conocido, ni tú ni tus antepasados, 7 algunos de los dioses de los pueblos que están todo en derredor de ustedes, los cercanos a ti o los lejanos de ti, desde un extremo del país hasta el otro extremo del país, 8 no debes acceder a su deseo ni escucharle, ni debe tu ojo sentirse apenado por él, ni debes sentir compasión, ni cubrirlo [protectoramente]; 9 sino que debes matarlo sin falta. Tu mano debe ser la primera de todas en venir sobre él para darle muerte, y la mano de todo el pueblo después. 10 Y tienes que apedrearlo con piedras, y tiene que morir, porque ha tratado de apartarte de Jehová tu Dios, quien te ha sacado de la tierra de Egipto, de la casa de esclavos. 11 Entonces todo Israel oirá y tendrá miedo, y no volverán a hacer nada semejante a esta cosa mala en medio de ti".  
O sea, por encima de los lazos familiares, está nuestra lealtad a la organización, que no es otra cosa que la confesión religiosa y sus directivas. ¡No digamos nada de una amistad íntima...!  ¡Eso ni se contempla siquiera...!

Para finalizar, acabaremos con la aplicación práctica en la actualidad de estos principios de tolerancia y respeto a los derechos humanos más elementales:
Así, en la actualidad, si la iniquidad es practicada por alguien en la congregación cristiana, el comité judicial de la congregación tiene la responsabilidad de investigar los hechos y expulsar a tal persona, para limpiar lo que es malo.  Pero cada miembro de la congregación deberá ser así de celoso por la limpieza de la congregación y la respetabilidad de la congregación ante Jehová, aún si el culpable fuese nuestra hija o nuestro hijo.  Cada uno de nosotros debe ser celoso en testificar sobre lo que sabe del caso, no reservándose información o evidencia alguna, por causa de nuestra relación familiar o de amistad.  Deberá estar de acuerdo con el veredicto emitido por el comité y apoyar su aplicación.  Zacarías 13:3, que dice: 
"3 Y tendrá que ocurrir [que], en caso de que un hombre todavía profetizara, su padre y su madre, los que causaron su nacimiento, tendrán también que decirle: ‘No vivirás, porque falsedad es lo que has hablado en el nombre de Jehová’. Y su padre y su madre, los que causaron su nacimiento, tendrán que traspasarlo debido a su profetizar".
El asunto está claro: delatar al familiar ante el comité judicial de la congregación compuesto por los que ostentan el cargo de anciano.  Después, como no se les puede apedrear literalmente, habrá que cortar todo trato con nuestra hija o hijo, o amigo.  ¡Esta es la norma escrita de la confesión religiosa!: lapidar social y familiarmente a los que desean abandonar libremente la confesión religiosa.

¿Qué podemos decir desde este púlpito virtual?  ¡Pues que no estamos de acuerdo en absoluto!  Por ese motivo lo denunciamos.  No queremos que nuestros hijos reciban este tipo de instrucción religiosa tan intolerante hacia las ideas de los demás y tan integrista como para llegar a renegar de familiares y amigos.

Por favor, ¡denunciemos estos excesos ante los organismos públicos competentes y asociaciones que fomentan los derechos humanos en nuestro país!

Por ti, por nosotros, por todos.  Lo documentamos todo, todo y todo.  ¿Quién es el padre de la mentira y de la teología fundamentalista?